Anteriormente hablé de uno de los trastornos más comunes en nuestra sociedad, la anorexia. Hoy hablaré de otro trastorno bastante conocido y que en ocasiones, suele acompañar a la anorexia, este es la bulimia nerviosa.
La bulimia es un trastorno alimentario que se caracteriza por comer de forma impulsiva y descontrolada excesivas ingestas en un corto período de tiempo, esto coloquialmente se conoce como atracón. Durante los atracones las personas no son completamente conscientes de todo lo que están comiendo, simplemente comen hasta cansarse y al acabar es cuando llegan los remordimientos. En esta fase, nada más acabar de comer, el sentimiento de culpa se apodera de la mente y comienzan los remordimientos y la culpabilidad. Finalmente, la persona se siente tan mal consigo misma que acaba yendo al baño a vomitar.
La persona que padece bulimia se ve y se siente gorda, es decir tiene una idea distorsionada de su propio cuerpo, a pesar de que aparentemente tenga un peso normal. De ahí, que la bulimia se asemeje a la anorexia, ya que ambas parten de que la persona se siente "gorda".
La diferencia es que en la anorexia dejas de comer y empiezas a hacer ejercicio para adelgazar más, y en cambio la persona bulímica suele tener episodios de atracones tras ayunar todo el dia o comer poco y suele acabar en vómitos por culpabilidad y miedo a engordar. En lugar de vomitar otras personas optan por ayunar, hacer más ejercicio del normal, tomar laxantes, diuréticos, etc.
Los síntomas de este trastorno son la ingesta desmesurada de alimentos en poco tiempo por lo que prefieren comer a solas para no sentirse juzgados, la bajada de peso excesiva y en un corto periodo de tiempo, que la persona se ausente para ir al baño después de comer, la autoagresión, el aislamiento social, etc. Se produce una pérdida de control sobre los alimentos, lo que genera una gran ansiedad. Esta pérdida del control se suele producir porque previamente te privas de ciertos alimentos y de repente, cuando te permites comer uno de esos "alimentos prohibidos" no puedes para de ingerirlos.
Aproximadamente el 50% de las mujeres padecen bulimia a lo largo de su vida, la edad más frecuente es la adolescencia, una etapa de cambios e inseguridades. La bulimia en hombres es mucho menos común, por cada diez mujeres un hombre suele tener este trastorno.
Este trastorno puede tener graves consecuencias como por ejemplo daño en los riñones, deshidratación, inflamación de esófago y estómago por el ácido del vómito, pérdida de cabello, piel reseca, problemas cardiacos, palidez en la cara, cefaleas, problemas dentales, pérdida de la menstruación, etc.
Para concluir, destacar que para superar este trastorno alimentario es fundamental la ayuda psicológica y el apoyo familiar. Se recomienda la terapia cognitivo-conductual, ya que ha dado muy buenos resultados y la mayoría de las personas que la realizan no suelen tener muchas recaídas. Para superar la bulimia es necesario que la persona sea consciente de que tiene un problema grave y lo admita. Solo si la persona se compromete será capaz de superarse el trastorno, ya que el proceso es largo y muy duro.
